ALLISON FOLMAR RESTAURA LOS DERECHOS DE LOS PADRES Y SALVA A LOS NIÑOS DEL ABUSO

La abogada Allison Folmar habla a los medios de comunicación acerca de defender los derechos de los padres y devolverles a sus hijos que los Servicios de Protección Infantil se han llevado ilegalmente.
Lo que empezó como un solo caso de los Servicios de Protección Infantil quitando a una niña a su madre ilegalmente, se convierte en una apasionada cruzada por los derechos de los padres por una abogada de defensa criminal.

Cuando la abogada de Detroit, Michigan, Allison Folmar recibió una llamada a las 2 de la mañana, contándole que una madre se había atrincherado en su casa durante 10 horas enfrentándose al Servicio de Protección Infantil, a un equipo de SWAT, a un tanque y a otras organizaciones del cumplimiento de la ley —todo para proteger a su hija de 11 años, Ariana, de tomar Risperdal— la respuesta inmediata de Folmar fue: “¡Yo la representaré!”.

Abogada de defensa criminal desde el 2000, Folmar estaba en un nuevo ámbito, y necesitaba hechos que la Comisión de Ciudadanos por los Derechos Humanos (CCHR) proveyó. Aprendió que Risperdal es un antipsicótico que tiene efectos secundarios irreparables, incluyendo manía, agresión, diabetes, ginecomastia (crecimiento de mamas) en los hombres y la muerte en los ancianos. En el caso de Ariana, cuyo comportamiento cambió tras una vacuna, su madre, Maryanne Godboldo, la llevó a un centro médico donde a Ariana se le recetó Risperdal y este le causó graves reacciones negativas. Con la ayuda de un médico, Maryanne deshabituó a su hija de usar el medicamento.

Ariana empezó a mejorar, pero el Servicio de Protección Infantil no aceptó que dejara de tomar la medicación. Obteniendo una orden ilegal estampada con el nombre de un juez que nunca la había leído, el Servicio de Protección Infantil intentó sacar a Ariana de su hogar, lo que precipitó las 10 horas de enfrentamiento. Maryanne al final fue engañada para dar a su hija con promesas de que Ariana no iría a una institución psiquiátrica, que es exactamente donde Folmar la encontró. “Eso es algo que nunca quieres volver a ver, otro niño en una institución así”, dice Folmar. Con hechos en la mano, Folmar fue a los tribunales, se liberó a Ariana del pabellón psiquiátrico y, después de numerosas batallas legales, todos los cargos contra Maryanne fueron retirados. Pero se había abierto la caja de Pandora. Folmar estaba inundada con llamadas de padres afligidos cuyos derechos para elegir la mejor ruta médica para sus hijos también habían sido violados. Kim Gee de Nueva York fue uno de estos casos, también el Servicio de Protección Infantil se había llevado a su hija por negarse a darle Risperdal. Gee dice: “Allison sabía que tenía una niña pequeña que fue ilegalmente confiscada por una razón falsa. Ella dijo: ‘¡Ah, no chica, vamos a traer a tu hija de vuelta a casa!’. Y no me lo puedo creer, eso es exactamente lo que pasó”.

Después del caso de Maryanne, Michigan publicó nuevas directrices haciendo ilegal para el Servicio de Protección Infantil intervenir cuando unos padres optan por no administrar a su hijo medicación que altera la mente. A los jueces también se les requiere que lean los documentos que tienen sus firmas en ellos.



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